Si hay algo recurrente en este blog, es que insistimos en la importancia de dos elementos de la industria de las cimentaciones especiales y los trabajos de tratamiento del terreno que son muy importantes: el personal cualificado y los equipos operativos. A este segundo elemento le dedicamos numerosos post, y en el día de hoy vamos a insistir en un detalle que es esencial en el buen funcionamiento de nuestros equipos: las orugas de traslación. Este elemento forma parte siempre de la maquinaría que empleamos, desde los equipos de pequeño diámetro, hasta las piloteras o grúas de celosía, ya sea para su uso como grúa auxiliar, perforación de muro pantalla, vibroflotación, columnas de grava, etc.
Estos son algunos post que ya hemos publicado que creo que son de interés:
- Grúas auxiliares en cimentaciones especiales.
- Partes principales de una grúa sobre orugas.
- Máquinas pilotadoras CFA. Descripción general.
- Máquinas para pilotes prefabricados.
En este post, además de recordar y profundizar en las funciones de cada una de las partes de las orugas de traslación, veremos algunas averías y problemas que se pueden dar si no se utilizan correctamente y/o no se hace el mantenimiento preventivo adecuado.
Partes principales de las orugas de traslación
- La rueda tractora es un motor hidráulico de pistones axiales y su función es la de tirar de la oruga. Esta pieza recibe el giro del motor hidráulico (que gira muy rápido) y mediante una serie de engranajes, reduce la velocidad de giro, y genera la fuerza necesaria para mover la grúa. Es una pieza bastante cara (60,000 euros) y es difícil de conseguir ya que no suele haber en stock.
- La rueda tensora sirve, como su nombre indica, para tensar la oruga (tejas). La rueda está conectada a un pistón, que al introducirle grasa produce el tensado de la rueda. La tensión ideal es la de 160-180 bar.
- Cadena de “ochos” (en adelante nos referiremos a ella simplemente como “cadena”, para simplificar) se desliza sobre los rodillos. Esta cadena no descarrila gracias a las “guías”. Las tejas se unen a los “ochos“mediante unos tornillos que deben ser apretados a un par de apriete determinado (350 Nm). Si te pierdes, acompaña la lectura con la primera figura del texto.
Las orugas son bien delicadas por eso, además de por cuestiones de estabilidad de la máquina, debemos trabajar siempre en una plataforma de trabajo firme y sin blandones, y capaces de soportar el peso del equipo sin que se produzcan hundimientos.
Las averías más comunes están relacionadas por el hecho de no trabajar en una plataforma de trabajo adecuada y por no realizar el mantenimiento preventivo correctamente. En la siguiente imagen podemos comprobar las consecuencias de una mala plataforma. La imagen habla por sí sola.
Averías principales en orugas de traslación
En general, y con el ánimo de no extendernos demasiado, diferenciaremos dos grupos de averías en función de la zona de la oruga que se vea afectada:
Rueda tractora y reductora
- Rotura del motor hidráulico de la rueda tractora.
El motivo puede ser las horas de trabajo o por el uso incorrecto.
- Rotura o aparición de fisuras en la rueda tensora.
Normalmente es debido a que las orugas de traslación no están trabajando correctamente. Es un elemento que puede comprometer gravemente la estabilidad de la grúa, por lo que debe ser revisado con frecuencia. La solución, en función de la gravedad, puede pasar por la sustitución de la misma o con una simple soldadura.
- Gripado del eje de la rueda tensora.
La máquina no puede trabajar en estas condiciones ya que la oruga se destensa.
El cambio de estos elementos no es sencillo (ni barato), y puede conllevar la parada del equipo de un par de días.
Desgaste excesivo rodillos y cadena
El principal motivo es el desgaste o deterioro de las guías de la cadena. En cuanto estas comienzan a desgastarse, doblarse, deteriorarse o abrirse, permiten que la cadena “descarrile” de los rodillos. Estos a su vez, si no están en muy buenas condiciones y/o junto a la suciedad y falta de engrase de la cadena, no giran sobre su eje y rozan con la cadena produciendo el desgaste de ambos elementos.
Si nos fijamos en la siguiente imagen, podemos ver cómo hay algunos tramos de la cadena que ni tan siquiera apoyan en los rodillos.
Comprobaciones a realizar en las orugas de traslación
Con el fin de evitarlo, hay que comprobar:
- El estado de las guías.
- Todos rodillos giran y que no están gripados.
- La correcta tensión de la cadena.
- Limpieza y engrase.
Como hemos podido ver, casi todos los problemas tienen su fuente por un mal manejo y cuidado de los equipos. Esto es debido tanto por no exigir(nos) una plataforma de trabajo adecuada, como por no realizar, no solo el mantenimiento, sino una simple revisión diaria.
Este post, como otros muchos de este blog, tiene como finalidad mostrar algunas de las averías, pero sobre todo la de concienciar de las buenas practicas que se deben tener en obra.
Pues aquí lo vamos a dejar por hoy, y ya sabéis que si queréis ser los primeros en conocer las novedades en el blog, no tenéis nada más que suscribiros al boletín.
Muchas gracias por vuestro tiempo y hasta pronto.
