En el post de hoy vamos a hablar de otro de los elementos imprescindibles: los tambores y los cabrestantes. En realidad hay un poco de confusión en este tema ya que son dos elementos que habitualmente se les llama del mismo modo.
La función de estos elementos es permitir el izado de cargas y la puesta en funcionamiento de elementos que permite la ejecución de nuestros trabajos. Para ello la grúa consta de:
- 2 tambores: Uno para cada cabrestante. En ellos se aloja (se enrollan) los cabrestantes y les transmiten la energía de izado.
- 2 cabrestantes: Los “cables” que transmiten la fuerza desde los tambores a la carga.
- 1 gancho: Conecta directamente con la carga.
Estos elementos “van de la mano”, y me explico. Cuando adquiramos una máquina de este tipo hay que estar seguros del uso que se le va a dar y el peso de las cargas que vamos a izar, ya que los tambores que lleve instalados nos van a marcar el diámetro del cabrestante que vamos a poder utilizar. Bien es cierto que los tambores se pueden cambiar, pero obviamente hay que hacer un esfuerzo económico que no hay que obviar. Así como el tambor nos marca el cabrestante a utilizar, este último nos marca el gancho que podemos usar. Cuando vayamos describiendo cada uno de los elementos veremos porque esto es cómo acabamos de decir.
Tambores de los cabrestantes
Siempre se dice que hay dos (el principal y el auxiliar), pero haciendo honor a la verdad hay que decir que hay alguno más, eso sí de menor entidad, como los que permiten el movimiento del polipasto o el montaje de los contrapesos.
También es un poco un error llamarle auxiliar y principal, porque si son iguales, ambos tienen la misma capacidad y posible uso.
Hay 3 tipos de tambores de cabrestantes, cuyas características técnicas están resumidas en la siguiente tabla:
Como anunciábamos un poco antes, el tambor que instalemos en la grúa nos va a definir el tipo de cabrestante a utilizar (26, 30 o 34 mm). Alguno pensará, pues instalo el de 25 Tn (aunque no me haga falta) por si algún día lo necesito. Es una opción, pero debería pensar que el tambor girará un 21% más despacio por lo que tus actividades se verán ralentizadas en ese mismo porcentaje…De paso dejadme comentar que de manera rutinaria hay que comprobar que ambos tambores giran a la misma velocidad.
Otra cuestión es que la capacidad nominal que marca el cuadro (16, 20 y 25Tn) suele minorarse. Hay que consultar siempre al fabricante.
Es uno de los elementos a los que más energía dedica el grupo hidráulico. Ya decíamos en su momento (pincha aquí) que para el movimiento de cada tambor el grupo hidráulico reserva una bomba (motor) de caudal variable de pistones axiales de los cuatro que de este tipo tiene el grupo hidráulico.
Accionamiento del tambor
El accionamiento del tambor se puede hacer de dos modos:
- Caída LIBRE: La acciona el operario con el pedal. Cuando suelta el pedal el cabrestante cae “libre” y cuando lo pisa lo “frena”. Un aspecto a tener en cuenta es que cuando se manejan pesos importantes, es muy fácil pasarse de velocidad durante el descenso. En esta situación los discos del freno vibran ocasionando desgastes Estos desgastes pueden provocar que al levantar el pedal, el freno suelte “de golpe” lo que es un deficiente comportamiento del mismo.
- Caída CONTROLADA: Se acciona con una palanca y la velocidad es constante. Con el fin de evitar los desgastes antes mencionados, cuando utilicemos la grúa para perforar con cuchara, hay que intentar utilizar la este modo el mayor tiempo posible y solamente la caída libre en el último tramo (los últimos 2-3 metros).
Si usamos la grúa como base para pantallas, hay que asegurarse que los dos tambores están equilibrados (ambos tiran con la misma fuerza) para que la cuchara esté compensada, permitiendo el correcto aplomado de la misma. Si esto no es así, hay que tomar medidas para solucionarlo.
Cabrestantes
Es el encargado de transmitir la fuerza y movimiento desde los tambores a la carga. Todo lo fiamos al buen estado de los cabrestantes.
Si sois seguidores del blog recordaréis que ya hemos hablamos largo y tendido en su momento de los cabrestantes, por lo que me voy a remitir a esos post:
- Cabrestantes en grúas.
- Tipos y características técnicas de cabrestante
- Manipulación e inspección de cabrestantes.
Un aspecto importante a controlar es que cuando coloquemos los cabrestantes en los tambores, deberemos evitar que estos queden montados ya que esto produciría un desgaste prematuro de los cabrestantes. Además hay que revisar que estén en tensión, ya que con el tiempo se destensan.
Gancho
Es el elemento que permite conectar el cabrestante a la carga. En muchas ocasiones no se utiliza, como en los casos en los que la grúa se utiliza como base para el uso de cucharas u otros elementos de los tratamientos del terreno.
El gancho no tienen ninguna particularidad, simplemente tener la precaución que se adapte al diámetro del cabrestante que estamos utilizando. Ojo con esto porque, en general, los ganchos sólo sirven para un diámetro en concreto de cabrestante.
Simplemente añadir que tienen un sistema de poleas que permite reducir la carga que soporta el cabrestante.
Mantenimiento
Por último, y no menos importante, permitidme que os recuerde algunos post en los que comentábamos las tareas de mantenimiento que se deben seguir para mantener estos elementos en perfectas condiciones de trabajo:
- Mantenimiento de grúas y equipos de cimentaciones especiales. A modo de introducción se expone lo que es el mantenimiento predictivo, correctivo y preventivo.
- Operaciones de mantenimiento II. Tambores de los cabrestantes, cabrestantes, giro de cabina y tren de orugas.
Con estos últimos comentarios sobre el mantenimiento vamos a dar por terminado el post de hoy. Si realmente estáis interesados en conocer en profundidad algunos detalles de este tipo de maquinaria, os invito a bucear por el blog porque hay bastantes post dedicados a esta temática.
Muchas gracias por la visita y espero volver a teneros por aquí de vuelta pronto.