Ante todo mucha calma. Así titulaba Siniestro Total el disco que publicó a primeros de los 90 del siglo pasado. Es lo que hay que tener cuando nos vemos en una situación como la que vamos a contar hoy. Además de producir un parón importante en la producción, es un asunto bastante peligroso desde el punto de vista de la seguridad de los trabajadores y de los viandantes. Por otra parte, puede afectar a infraestructuras ajenas a las obra (acera, calzada, tuberías de gas,…).
Nos centraremos en los desprendimientos importantes (por su volumen) y persistentes, que se dan en la parte superior del murete guía. Dejaremos fuera los desprendimientos que se pueden dar en profundidades relativamente importantes (más de 10m) por la presencia de niveles de gravas o arenas poco compactas, ya que estos, más allá de incrementar los excesos de hormigón, en realidad no entrañan ningún peligro.
Peligros por desprendimiento en la parte superior del panel
Hacer notar que es habitual que existan desprendimientos en la parte superior del panel. El problema viene cuando estos pueden ser peligrosos porque:
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- Hay posibilidades de que el murete guía se cierre o se derrumbe. Este hecho puede traer consigo que el murete arrastre el terreno donde está apoyado.
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- Los desprendimientos pueden continuar durante la introducción de la armadura y el hormigonado, complicando estos trabajos y corriendo el riesgo de que el material desprendido se mezcle con el hormigón.
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- La máquina puede tener comprometida su estabilidad. Además, su considerable peso (más de 50 Tn.) puede colaborar a empeorar las cosas.
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- Los desprendimientos pueden descalzar la acera y provocar colapsos de tuberías de gas, por ejemplo, con el riesgo que esto conlleva.
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- Socavones en calzadas cercanas.
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- La cuchara quede atrapada en el panel.
Por estas, y por otras muchas razones, hay que tomar este tema con bastante seriedad.
Partiremos de la base que hemos proyectado y ejecutado el murete guía teniendo en cuenta las recomendaciones de la normativa y las “reglas del arte”. Aquí os dejo un par de links de unos post antiguos donde tratamos estos aspectos en profundidad:
Motivos por los que se produce desprendimiento en la parte superior del panel
El motivo principal que produce estos desprendimientos es poque el terreno en el que está apoyado el muro guía no es de calidad suficiente. No significa necesariamente que sean rellenos antrópicos, también se pueden dar estos problemas en terrenos naturales como gravas o arenas mal graduadas.
El problema puede venir motivado porque simplemente no se hizo una buena evaluación de la estabilidad de estos materiales o simplemente, su retirada o tratamiento resultaba tan costoso que se prefirió asumir el riesgo (o peor aun, se es totalmente ajeno a la existencia del peligro). Este sería el caso en el que la obra está en manos de incompetentes, lo que no suele ser el caso, así que vamos a matizar. Cuando los desprendimientos se producen de manera local en la obra, es decir, no son sistemáticos, hay que pensar que el planteamiento general ha sido correcto y que circunstancias concretas de la obra han provocado los desprendimientos:
- En situaciones en que el hormigón queda muy por debajo de la cota inferior del murete guía, tenemos que rellenar con mortero hasta esa cota. Si esto no lo hacemos y lo rellenamos con gravas o con material de relleno (o simplemente no lo rellenamos), la estabilidad del murete estará comprometida.
- Los paneles grandes o el dejar abiertos paneles sin terminar por la noche o durante un fin de semana no es recomendable cuando tenemos terrenos blandos en la parte superior del panel. No digo que la práctica de dejar abiertos paneles es algo peligroso en sí mismo, ya que está exenta de riesgo siempre y cuando el terreno sea apropiado.
- El tener un nivel freático somero impide que la bentonita trabaje correctamente. Recordemos que debemos tener al menos un metro entre la cota de la cara superior del murete guía y el nivel freático, pero aun así, en los primeros metros y ante un terreno blando o poco competentes, podemos tener problemas de estabilidad.
- Terrenos muy permeables. Si es así, el lodo se filtrará y no se formara el famoso “cake” necesario para que el lodo bentonítico empuje las paredes. Así las cosas, el nivel de los lodos se situará muy por debajo del murete guía, quedando este desprotegido.
- Los paneles en esquina son una fuente importante de problemas ya que tienden a desprender.
- Ni que decir tiene que los problemas se multiplican cuantas más esquinas tengamos (enlaces entre pantallas, pilotes con forma de “T”, etc.)
- Un periodo continuado de fuertes lluvias puede reblandecer el terreno. Un terreno que en principio no debería de darnos mayores dolores de cabeza, puede convertirse en un problema inesperado.
- Una avería en la máquina perforadora puede alargar el tiempo necesario para perforar el panel, lo que pone en riesgo la estabilidad del panel. En general, cuanto más tiempo se requiere para perforar un panel, más posibilidades hay de tener desprendimientos.
- El nivel de bentonita debe de estar siempre casi a la altura de la cota superior del murete guía. Si no está a ese nivel, estaremos poniendo en riesgo la estabilidad del panel. Tampoco es muy recomendable que el nivel de bentonita fluctúe demasiado. A veces los maquinistas y sus ayudantes tienen la mala costumbre de no llenar el murete de los lodos hasta que el nivel no está algo por debajo de la cota inferior del murete. Si el nivel de los lodos está por debajo del murete, el “oleaje” que tiene el lodo provocado por las entradas y salidas de la cuchara, contribuye a erosionar la base del murete.
- Un golpeo continuo del murete cuando introducimos la cuchara en el panel tiende a desestabilizar el terreno que sirve de apoyo al murete y al propio murete. Esto se puede dar porque o bien el maquinista no es muy hábil, o porque no ve bien el murete.
Y así podríamos seguir… Seguramente el lector tenga alguna experiencia personal, así que le animo a compartirla con nosotros. Seguro que aporta muchísima utilidad.
Aquí lo vamos a dejar por hoy. Hemos planteado el problema y las posibles causas. En un futuro post veremos cómo podemos detectar que estamos teniendo estos desprendimientos y como tratarlos, tanto de manera preventiva como en una situación de emergencia.
Gracias por vuestra atención y os espero pronto por aquí.
Y en el caso de tener una corriente de agua en un suelo permeable con gran contenido de gravas y el polímero o bentonita no pueda mantener un nivel alto, que se recomienda hacer. Mi opción es mortero en el pozo hasta estabilizar, pero no encuentro procedimiento o norma para guiarme. Espero me puedan ayudar
Hola Yosvany,
efectivamente, con gravas con poca matriz la bentonita se pierde y el polímero ni te cuento.
La cuestión es que para estas situaciones NO hay normas. Los que trabajamos en esta industria nos tenemos que acostumbrar a que todo no está normalizado o reglado. Hay que implementar en obra soluciones específicas para cada problema.
Saludos.
[…] implícito que algo posiblemente no se haya hecho bien del todo. Hace algún tiempo hicimos un post introductorio de este tema en el que vimos las consecuencias que pueden conllevar estos […]
, “su retirada o tratamiento resultaba tan costoso que se prefirió asumir el riesgo (o peor aun, se es totalmente ajeno a la existencia del peligro). Este sería el caso en el que la obra está en manos de incompetentes, lo que no suele ser el caso, así que vamos a matizar.”
XDDDD Genial…. Muy buena entrada para un interesante tema al que no se le presta siempre la atención debida…