El titulo ya lo anuncia bastante. En efecto, es la segunda parte de un post que ya se publicó hace algunas semanas (pincha aquí para enlazar con él). Pues bien, en aquella ocasión hacíamos una introducción de un aspecto esencial en la ejecución de muro pantalla, que no es otra que la de conocer los dos sistemas junta, y por ende, de ejecución de muro pantalla.
Creo que es importante que se lea el anterior post para poder poner en composición de lugar este. En cualquier caso, lo que hablábamos entonces era básicamente:
- En ningún caso se valora la conveniencia de usar uno u otro sistema, ya que con los dos se puede ejecutar un muro pantalla de calidad.
- Sólo afecta a los muro pantalla ejecutados con cuchara, ya sea esta hidráulica o mecánica/al cable. El sistema con hidrofresa merece capítulo aparte ya que no necesariamente se usan juntas.
- Nos centramos únicamente en la excavación, obviando temas referentes a verticalidad, uso de bentonita, desarenado, etc.
- El usar un sistema u otro es una decisión a nivel de empresa.
- La explicación se basa en lo que llamamos panel “de avance”:
Dicho esto, pasamos a describir la metodología del sistema con junta trapezoidal/plana, haciendo incidencia en las diferencias que puedan existir con el de junta circular.
Ejecución de muro pantalla. Sistema junta trapezoidal/plana
Particularmente es con el que más he trabajado, y del que más puedo responder. Como señalábamos en el post anterior, apareció después de la junta circular y poco a poco fue introduciéndose en el mercado, tanto en empresas grandes como en las pequeñas. Hoy en día es un sistema tan o más presente en el mercado como el de junta circular.
Los elementos que serán necesarios son:
- Cuchara hidráulica o mecánica (al cable) montada en una grúa sobre orugas. En este caso no tiene ninguna diferencia con el otro sistema.
- Las mandíbulas y las guías deben de tener los laterales planos, de manera que se adapte a la forma de la junta. Recordemos que el otro sistema obliga a que estos elementos tengan los laterales redondeados.
- Las cucharas pueden ir dotadas en los laterales de unas “manos” o “rascadores” que permitan que la cuchara se enganche a la junta.
- Rascador externo. Si las cucharas no están dotadas de “manos”, tendremos que usar este elemento que colgaremos de la grúa auxiliar, y que servirá, al igual que las “manos”, para despegar la junta del hormigón.
- Junta trapezoidal o plana. La denominación es bastante libre y lo que viene a decir es que por un lado es plana y por el otro es trapezoidal, aunque está última forma puede variar bastante según con la empresa que demos. Como en el caso de la junta circular, suelen suministrarse en tramos de 3, 6 y 9 metros, empalmándose mediante sistema machi-hembra, aunque tampoco es posible generalizar sobre esto último. El ancho de la junta es siempre unos centímetros menores que el espesor de la pantalla, para garantizar que la junta entre y se pueda maniobrar con ella (recordemos que el diámetro de la junta circular era exactamente el mismo que el espesor de la pantalla)
En este caso, a diferencia del otro sistema, no es necesario el uso de un gato-extractor de junta.
Como hicimos en el caso de junta circular, vamos a describir cómo sería el proceso paso por paso:
1. Partimos de una situación en la que la junta está adherida (por su parte trapezoidal) al hormigón, quedando por lo tanto la parte plana “mirando” al terreno del panel que se va a excavar. Aquí tenemos algunas de las diferencias con respecto al otro sistema:
– Lo normal en un panel de avance es que tengamos que hacer dos bocados para completar la longitud del panel, quedándonos un tacón entre ambos bocados.
– Seguiremos llamando al bocado “virgen” al que está más alejado de la junta, mientras que al otro le llamaremos bocado “junta”.
– Como principio, la mandíbula debe morder siempre en terreno o en hueco. Una novedad es que en el bocado “junta” es posible que una valva muerda en terreno y la otra en hueco (imaginemos que el panel no da para que podamos hacer dos bocados más tacón). Esto es posible porque la cuchara se puede enganchar (con el uso de las “manos”) a la junta, impidiendo que la cuchara se vaya al hueco ya excavado. La posibilidad de perder la verticalidad aumentan, pero si se mantiene la cuchara enganchada y con paciencia, la perforación queda correctamente ejecutada. ¡Ojo!La cuchara debe ir dotada de las “manos”, sino esto no es posible.
En las siguientes figuras podemos ver la perforación del bocado “virgen”. Podemos ver además la disposición de la junta.
2. Excavación del bocado “junta”. En este caso tenemos un bocado completo, es decir, las dos valvas muerden en el terreno.
Si la cuchara va dotada de “manos”, es bueno siempre ejecutarlo con las “manos” enganchadas a la junta, con lo que conseguiremos dos cosas:
– La cuchara baja bien pegada a la junta.
– Las “manos” también se llaman “rascadores” porque mientras van enganchadas a la junta van rascando el hormigón que ha quedado adherido a los laterales de la junta.
Si no tenemos “manos” en la cuchara, cuando el bocado esté terminado tendremos que enganchar el rascador a una grúa e ir limpiando el hormigón adherido a la junta.
Si todo va normal, la junta debe quedar liberada cuando el bocado está terminado. Podemos dejarla ahí hasta que tengamos que trasladarla al otro lado del panel o sacarla del panel y dejarla en el suelo. Esto no tiene mucha transcendencia y dependerá de algunos factores en los que no merece la pena entrar (longitud de la junta, verticalidad, necesidad de desarenado, etc.).
Este bocado suele ser más lento que el anterior.
Las siguientes imágenes ilustran lo comentado.
3. El siguiente paso sería excavar el “tacón”, que es el terreno que nos queda entre los dos bocados, por lo que las dos valvas muerden en vacío. La dimensión del tacón deberá ser aquella en la que el tacón sea estable. Si es demasiado pequeño, puede que durante la perforación del bocado “junta” se nos vaya derrumbando el terreno. Como decíamos, en este caso el tema es menos dramático porque la cuchara va enganchada a la junta (si la cuchara está dotada de “manos”) y podemos evitar desviaciones de la perforación.
Teniendo en cuenta lo anterior, para una cuchara de 2.7m y una pantalla de 1.0m de espesor, el tacón debería de estar entre 0.6m y 2.0m y el panel tener una longitud (de terreno a hormigón, en el eje longitudinal) de entre 6m y 8.0m. Estas longitudes son orientativas, y no estamos teniendo en cuenta otros aspectos a la hora de definir la longitud de los paneles que en algún momento trataremos.
Como decíamos antes, el hecho de poder engancharse la cuchara a la junta nos permitiría hacer paneles de, por ejemplo, 3.5m.
La perforación del bocado será más rápida que cualquiera de los dos bocados anteriores.
4. Con el panel perforado, habría que colocar la junta, asegurándonos que:
– La cara trapezoidal se queda en el lado recién excavado.
– Se coloca de manera estrictamente vertical.
– Debe sobresalir por encima del murete guía 0.5-1.0m.
Como en el sistema de junta circular, tendremos que usar la grúa auxiliar, o el mismo equipo que ha perforado si la cuchara que estamos empleado es mecánica/al cable.
Una de los aspectos que son particulares a este tipo de junta es que en la parte trapezoidal se puede instalar una goma (“wáter-stop”), que va a quedar justo en el eje longitudinal del muro pantalla, mejorando la impermeabilidad de la junta. Las siguientes imágenes ilustran bastante bien cómo quedaría:
Otra de las particularidades de este sistema es que una vez finaliza el hormigonado, podemos dar el panel por terminado. Aquí no hay que retirar la junta al poco de terminar (de hecho hay que dejar unas 12 horas al menos). Esto, además de eliminar los riesgos asociados a la extracción de la junta, evita que tengamos que dejar un equipo de trabajadores para retirarla. Hay que pensar que el hormigonado muchas veces termina a última hora de la tarde, y resulta un problema económico y logístico el dejar dos o tres trabajadores para esta labor. La junta trapezoidal puede dejarse, teóricamente, el tiempo que se quiera, aunque lo ideal es que sea menos de una semana, ya que cuanto más tiempo pase, más resistencia toma el hormigón y más puede costar extraerla cuando excavemos el panel adyacente.
Si viéramos la sección de la junta entre dos paneles ya hormigonados, se vería claramente que es de geometría trapezoidal, haciendo honor al nombre. Si instalamos una goma “wáter-stop”, podemos imaginar que la ruta que tendría que seguir el agua (en caso de existir nivel freático en la obra) para atravesar la junta es bastante complicada.
Como colofón, incidir en un aspecto que hacíamos en el post introductorio: si todo se hace siguiendo el procedimiento y lo realizan personas experimentadas y responsables, la garantía de que todo vaya bien es total tanto con un sistema como con otro. Los matices pueden son muchos, y aquí hemos simplificado bastante, por lo que si alguien se anima a enriquecer el post, por supuesto, es bienvenido.
Nos ha quedado un poco largo, pero creo que ha merecido la pena. En el futuro incidiremos en más detalles.
Muchas gracias por vuestro tiempo.